domingo, 24 de junio de 2018

Día #9: Serpa - P.N. Vale do Guadiana - Mértola- Odemira

Agradecidos estamos a la hospitalidad de Cristiana en el alojamiento de Serpa, junto a la muralla y bajo el acueducto. Situación privilegiada, casa acogedora y agradables conversaciones en las que hemos descubierto muchas cosas de estas tierras y de sus gentes. Nos vamos con pena. 

Pero hay que seguir camino. Bajamos lo más al sur que se puede en el Alentejo, frontera ya con el turístico Algarve. Nos introducimos en el Parque Natural Vale do Guadiana que junto a la Sierra de San Mamede por la que empezamos nuestra aventura portuguesa, supone uno de los pulmones verdes más importantes. 




En la zona conocida como Pulo de Lobo, el Guadiana dibuja unas formaciones rocosas que ha ido erosionando con el paso del tiempo.

El acceso, desde esta orilla del rio no está preparado y hay que ir con cuidado. Además, seguramente no hayamos tenido las mejores vistas, pero aún así el entorno era muy bonito. 











Siguiente parada para visitar una mina abandonada. La población de Sao Domingos fue hasta 1968, cuando cesó la explotación de la mina de pirita, un lugar con ambiente minero. De aquellos años quedan restos de las casas o barracones de los trabajadores (algunos restaurados y en los que vive gente), las oficinas, el campo de juego, la iglesia... y alguno de los cortes como el del embalse de ácido. 











Otro de los embalses, el de aguas limpias, lo han acondicionado para poder disfrutar de un día de playa. Así que no hemos desaprovechado la ocasión para darnos un baño, comer y echarnos una siesta bajo la sombrilla de paja.






De aquí a Mértola, otro de los must del viaje. En este caso por dos motivos: por su ubicación junto al Guadiana (no en vano es el último tramo navegable del Rio)...







...y por que mantiene las esencias árabes mejor que cualquier otra población portuguesa. 
Un breve paseo hasta el Castelo, ver la iglesia por fuera (a las 17 horas ya habían cerrado!!!), tomar una Sagres y un pingado, y comprar pan alentejano que como os hemos contado, está para comérselo a solas!
















Ahora toca cambio de tercio. Abandonamos la zona interior, más rural, quizás más pobre, para poner rumbo al litoral, donde nos esperan unos días de playa (siempre y cuando el tiempo acompañe). Desde Mértola poco más de 90 minutos para llegar a Odemira, nuestro siguiente destino.

Seguiremos informando. 

2 comentarios:

  1. Hola chicos, las fotos y el paisaje espectacular!! pero no se porqué no se ven los comentarios.
    Besitos

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  2. Ahora si chicos!! Mucho mejor comentado!! Jajaa

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